15 de octubre de 2014

Como el elefante...


Hace años leí un cuento que hablaba de la indefensión aprendida. No recuerdo la historia tal cual pero era algo así como que un niño que iba al circo con su padre observaba como un elefante de tamaño enorme estaba atado por una de sus patas a una argolla mucho mas pequeña que él. El niño se preguntaba cual era el motivo por el cual el elefante no tiraba con apenas un poco de sus fuerzas y así podría ser libre. La historia explicaba como el elefante lloró y lloró las primeras noches que pasó allí atado luchando por escapar hasta que llegó un momento que aprendió que no podía soltarse de allí y ahora, a pesar de que le resultaría fácil, el elefante ya ni siquiera lo intentaba.

Cuento esta historia porque en el facebook de ximielgar acabo de leer un artículo que relacioné de inmediato con el elefantito.


Muchas veces se ven comportamientos en los niños debidos a estas etiquetas que se les ponen de forma injusta. 
Es tan sencillo como tener en cuenta que riñas y gritos conllevan actitudes negativas por parte de ellos. Sin embargo el trato con afecto y seguridad provoca en los niños nuevos comportamientos!
No hay niñ@ mal@! 
Besinos... Luisa. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario